La fianza del alquiler está destinada a reparar posibles daños en el inmueble o a compensar mensualidades impagadas. Este depósito, que es equivalente a un mes de renta, debe entregarlo el inquilino al propietario para garantizar que se cumplirán las condiciones del contrato de alquiler. «A la celebración del contrato será obligatoria la exigencia y prestación de fianza en metálico en cantidad equivalente a una mensualidad de renta» (art. 36 de la LAU).

La posterior devolución de la fianza deberá realizarse por parte del propietario en un plazo de un mes desde que finaliza el contrato y se entregan las llaves. Pero ¿se puede perder este dinero? ¿En qué casos el casero podría no realizar la devolución de la fianza del alquiler? .

5 motivos para no devolver la fianza del alquiler
Si todo está correcto y se han respetado los términos del contrato, se debe recibir la fianza sin problemas. De hecho, de acuerdo con el artículo 36.4 de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), «El saldo de la fianza en metálico que deba ser restituido al arrendatario al final del arriendo, devengará el interés legal, transcurrido un mes desde la entrega de las llaves por el mismo sin que se hubiere hecho efectiva dicha restitución» (art. 36 LAU). Es decir, si el propietario tarda más de un mes en entregarla, se podrá reclamar intereses.

Alquilar un piso es un proceso emocionante, pero hay que tener en cuenta ciertos aspectos para no perder la fianza que dejamos al inicio. Aquí te cuento algunos de los motivos más comunes por los que podrías perderla.

  1. Daños en el inmueble: Es fundamental cuidar el piso como si fuera propio. Reparar cualquier daño, por pequeño que sea, antes de mudarte es esencial para asegurar la devolución de la fianza.
  2. Falta de limpieza: Dejar el piso sucio puede ser motivo suficiente para perder la fianza. Limpia bien cada rincón antes de entregarlo.
  3. Retraso en el pago del alquiler: Ser puntual con los pagos no solo mantiene una buena relación con el propietario, sino que también evita que se deduzcan cantidades de la fianza.
  4. Incumplimiento del contrato: Asegúrate de leer bien el contrato y cumplir todas las cláusulas. Desde no tener mascotas hasta respetar las normas de convivencia, todo cuenta.
  5. Modificaciones no autorizadas: Hacer cambios en la estructura o la decoración del piso sin permiso puede resultar costoso. Siempre consulta al propietario antes de realizar cualquier modificación.

Cuidar bien del piso no solo garantiza la devolución de la fianza, sino que también puede abrirte puertas para futuras recomendaciones y alquileres. ¡Buena suerte con tu alquiler!

Fuente : Internet

Jacqueline Álvarez servicios Inmobiliarios te brinda la ayuda para en todo tramite inmobiliario que necesites. Visítanos en nuestra oficina inmobiliaria en Parla